Pruebas de concepto: cree soluciones que resuenen
Si un árbol cae en un bosque y no hay nadie que lo oiga caer, ¿diría que fue algo que resonó? Asegúrese de que su solución resuene con las pruebas de concepto.
Según la Escuela de Negocios de Harvard, el 95% de todos los lanzamientos de productos fallan. Como podemos ver, puede ser un desafío decidir en qué producto e ideas invertir y cuándo abandonar la idea. Por eso es esencial asegurarse de que todos los aspectos que conforman una visión estén lo más cerca posible de la perfección antes de sacar un producto al mercado, y justamente aquí es donde entra la prueba de concepto.
Las pruebas de concepto permiten refinar un producto o concepto al obtener retroalimentación directamente del mercado objetivo. Estas pruebas ofrecen información crucial sobre cómo responderán los clientes, lo que ayuda a evitar errores costosos y a comprender mejor el mercado de la empresa.
Esencialmente, la idea detrás de las pruebas de concepto es crear una experiencia mejorada para el cliente. Y la investigación nos ha demostrado que es beneficioso para la empresa someter a prueba sus ideas ante una muestra de personas que pueden representar idealmente el enfoque y la respuesta del mercado objetivo.
Siga leyendo para descubrir el qué, el cómo y el porqué de las pruebas de concepto antes de que le compartamos algunas de las ventajas del proceso y las mejores prácticas metodológicas. ¿Nuestro objetivo? Conocer a fondo la mejor manera de probar nuevas ideas antes de que lleguen al mercado.
¿Qué es la Prueba de Concepto?
Comencemos con una definición al estilo antiguo:
La Prueba de Concepto es el proceso de obtener una idea evaluada por el público objetivo antes de que esté disponible para el público.
El objetivo es evaluar las actitudes e intenciones hacia el desarrollo, evaluando las reacciones iniciales. Estamos hablando de los aspectos positivos, los defectos y la aceptación general del mercado.
Las pruebas de concepto evalúan una idea para un producto, servicio o proyecto. El sistema de evaluación utiliza una variedad de encuestas para preguntarles a los clientes sobre las ideas de la empresa y si les gustan o no.
Las empresas utilizan las pruebas de concepto para determinar cómo reaccionará su público objetivo a las nuevas características y luego, cuando sea necesario, ajustar los proyectos en función de los comentarios de los clientes.
Es un enfoque que presenta ideas desarrolladas ante participantes del mercado cuidadosamente seleccionados para ver la percepción que tienen sobre las ofertas. A través de la correcta implementación de las pruebas de concepto, una empresa puede comprender el impacto que un producto o idea puede tener. A partir de ahí, las empresas pueden decidir si vale la pena o no seguir adelante con el plan.
Y cuando hablamos de ese producto o idea lo interesante es que ¡puede ser cualquier cosa! Podría ser un nuevo logotipo, una próxima campaña o cualquier tipo de oferta, cuyo éxito depende del consumidor.
La prueba generalmente ocurre durante la etapa de desarrollo para probar el éxito de una nueva idea de producto antes de que se comercialice, lo que proporcionará la orientación necesaria para identificar y comunicar las principales ventajas y usos de los productos y servicios.
Pero ¿cómo se realiza esta prueba y cuál es el mejor método a seguir?
El Cómo: encuestas sobre pruebas de concepto
Las organizaciones y las empresas utilizan encuestas para realizar las pruebas de concepto y, en general, se trata de una propuesta fácil de utilizar en empresas de todos los tamaños.
Las encuestas de prueba brindan a las empresas una valiosa retroalimentación que explica lo que les gusta y lo que no les gusta a los participantes sobre un concepto. Con esto en mente, se deben considerar los siguientes principios durante la creación de una encuesta de prueba de concepto:
1. Tener una meta
¿Le resulta difícil formular preguntas? A menudo, ayuda a establecer un objetivo general de la encuesta. ¿Cuál es el propósito de la prueba y los detalles específicos que se desea obtener de los encuestados?
Tener un objetivo claro ayuda a crear preguntas relevantes que proporcionan información única sobre las perspectivas de los clientes.
2. Crear una estructura
Las preguntas relacionadas entre sí deben agruparse en la encuesta, creando un flujo más fluido y más fácil de responder.
Varios formatos de encuestas de prueba están disponibles para su implementación. Cada uno ayuda a minimizar el riesgo y a maximizar los ingresos al introducir algo nuevo en el mercado. Las pruebas de concepto incluyen métodos de prueba multipropósito que pueden probar con precisión cada aspecto de un concepto en detalle para llegar a conclusiones precisas que ayuden a decidir su factibilidad.
Administrar el lanzamiento de nuevos productos y servicios es difícil, y aún más bajo presión, por eso es clave asegurarse de que los productos se conecten con el cliente antes de su lanzamiento al mercado.
El Por qué: realizar pruebas de concepto
La prueba de concepto es un proceso que casi cualquier empresa puede realizar cuando busca tener en sus manos más información y conocimiento acerca de su clientela; a continuación, encontrará algunos comentarios que le pueden ser de utilidad:
• ¿El producto se destaca frente a los de mis competidores?
• ¿Capta la atención?
• ¿La marca está bien representada?
• ¿Lo compraría el cliente?
Las respuestas a estas preguntas pueden hacer que sea más fácil identificar qué concepto elegir y, al mismo tiempo, ayudar a perfeccionar el producto final.
Ventajas de las Pruebas de Concepto
Si bien nos puede parecer que una idea es genial, las únicas opiniones que realmente importan son las opiniones de los clientes, ¿verdad? Es importante saber que no funcionará para una producción masiva si la prueba de concepto indica que lo que se propone no les gusta a los clientes.
Las empresas pueden evitar el lanzamiento de campañas ineficaces y sin éxito probando la idea de antemano para después cosechar los frutos. Empecemos abordando algunas de las recompensas del método de prueba, comenzando por:
1. Ofrecer flexibilidad
Al tener en cuenta que la mayoría de las pruebas usan encuestas para obtener comentarios de los clientes, se les puede preguntar sobre cualquier aspecto de una idea, incluido el precio, el estilo y el tono. Básicamente, las empresas pueden validar cada detalle de una idea antes de sacar al mercado el producto.
Las pruebas de concepto garantizan que los investigadores, gerentes y líderes tomen las decisiones correctas. Los errores y las repeticiones cuestan, por lo que es vital utilizar la investigación y los conocimientos de la audiencia para tomar las decisiones correctas.
2. Reunir apoyo
A través de la prueba de concepto, se puede obtener apoyo para una idea desde una etapa temprana. Si una idea de producto o servicio requiere una gran cantidad de aportes de los líderes senior o colegas, brindarles un “primer vistazo a la evidencia positiva puede acelerar drásticamente el proceso”. Al proporcionar evidencia del potencial del trabajo en el que participarán, un equipo adquiere más confianza y está más dispuesto a apoyar el proyecto y a hacer un esfuerzo adicional.
3. Mitigar las malas ideas
Las empresas de todas las formas y tamaños son susceptibles a cometer errores si no prueban sus ideas primero. Lamentablemente, las consecuencias de perseguir una mala idea suelen ser significativas. Las malas ideas pueden hacer que una empresa adquiera una reputación negativa, lo que puede influir en gran medida en la capacidad de una organización para crecer o incluso mantenerse estable.
Las pruebas de concepto evitan que una empresa aplique sus recursos en el lugar equivocado. Una idea puede parecer exitosa, pero su valor real solo se determina cuando se la presenta al cliente.
4. Optimizar la inversión en recursos
Esta ventaja particular nos habla a todos en un nivel más tangible. Las empresas corren el riesgo de perder sus recursos limitados al invertir en una idea no probada que puede o no funcionar.
Al seleccionar correctamente a los mejores participantes en la investigación, las organizaciones pueden reducir el riesgo al realizar los cambios necesarios que hacen que el concepto esté listo para el mercado.
5. Ingresar la retroalimentación
Finalmente, la prueba de concepto es una forma eficiente de retroalimentar a los tomadores de decisiones. A través de la recopilación de datos, es fundamental tomar decisiones basadas en predicciones específicas del mercado.
Es un proceso de aprendizaje abierto que va en ambos sentidos, con un compromiso continuo con el mismo público objetivo, pero ¿cuáles son las opciones de métodos disponibles y cuál es el mejor método para satisfacer las necesidades de mi empresa?
El Bono: Métodos de Prueba de Concepto
A lo largo de los años, los investigadores han diseñado y aplicado muchos métodos de prueba de conceptos diferentes. Lamentablemente, no hay suficiente espacio aquí para detallar en profundidad todos los diferentes métodos de prueba de conceptos; de hecho, probablemente deberíamos escribir un blog completo por separado sobre este tema. Pero por ahora, permítanos ofrecerle rápidamente una breve idea de algunas de las opciones.
Estos son los cuatro métodos principales de prueba de concepto:
• Pruebas de comparación
• Pruebas monádicas
• Pruebas monádicas secuenciales
• Pruebas protomonádicas
Los métodos se clasifican en función de cómo se muestran los conceptos, y cada uno de ellos es adecuado para diferentes tipos de investigación. Echemos un vistazo a cada uno con un poco más de detalle, abordando los pros y los contras de cada uno:
Comparación: En las pruebas de comparación, se presentan dos o más conceptos y los encuestados comparan los conceptos utilizando un sistema de calificación o clasificación.
Las pruebas de comparación ofrecen resultados claros y fácilmente comprensibles, en los que es fácil determinar qué concepto es la mejor opción.
Sin embargo, uno de los inconvenientes es que los resultados carecen de contexto. No hay forma de saber por qué los encuestados eligen un concepto en lugar de otro
Es esencial comprender estos detalles antes de lanzar un producto con éxito.
Monádica: El público objetivo de una encuesta de prueba monádica se divide en varios grupos y a cada grupo se le muestra solo un concepto. Así, este modelo analiza en profundidad un único aspecto y suele ser breve y muy focalizado.
Las encuestas de prueba son breves y permiten a los investigadores hacer múltiples preguntas de seguimiento, proporcionando un mayor contexto sobre por qué un concepto específico es mejor que los demás.
Uno de los inconvenientes es que, como el público objetivo está dividido en varios grupos, el tamaño de la muestra necesario para realizar una prueba monádica es muy amplio. El incremento del tamaño de la muestra aumenta considerablemente el costo de la investigación.
Monádica secuencial: Las pruebas monádicas secuenciales también dividen al público objetivo en varios grupos, pero en lugar de mostrar un solo concepto, a cada grupo se le presentan todas las ideas.
A continuación, se les hace a los encuestados el mismo conjunto de preguntas de seguimiento para cada concepto con el fin de obtener más información, y el orden de los conceptos es aleatorio para evitar sesgos.
Las pruebas monádicas secuenciales son más rentables y fáciles de realizar, ya que el tamaño del público objetivo requerido para realizar una prueba monádica secuencial es relativamente pequeño; por lo tanto, se pueden probar múltiples conceptos en una sola ronda.
Sin embargo, el tamaño del cuestionario es relativamente grande, lo que puede afectar la tasa de finalización y se podría introducir un sesgo de falta de respuesta. Las pruebas monádicas secuenciales también pueden verse afectadas por el sesgo de interacción o el sesgo de orden.
Protomonádico: este método incorpora una prueba monádica secuencial seguida de una prueba de comparación.
Los encuestados primero evalúan múltiples conceptos y luego se les pide que elijan la idea que prefieren.
Crear una encuesta y utilizar eficazmente un aleatorizador de bloques ofrece los mejores resultados.
Este diseño ayuda a validar los resultados de la prueba monádica secuencial y los investigadores pueden verificar si el concepto seleccionado en la prueba de comparación es compatible con las respuestas obtenidas.
Conclusiones: Conozca más sobre las Pruebas de Concepto
Ya sea que esté en las primeras etapas de investigación de una nueva idea de producto o en lo más profundo de un ciclo de desarrollo de un producto, debe poner a prueba su concepto.
Como hemos visto, la prueba de concepto es más que simplemente “obtener retroalimentación”, e implica considerar la metodología, los componentes y el flujo de la encuesta para obtener el máximo provecho.
A veces, puede ser complicado llevarlo a cabo con éxito, y muchas empresas buscan apoyo sobre la mejor manera de ejecutar el proceso. Cuando las pruebas de concepto se realizan correctamente, se ahorra tiempo, dinero y energía. Se trata de una herramienta esencial que proporciona los conocimientos necesarios para avanzar con confianza.
Usted también puede ampliar sus ventajas competitivas mejorando su capacidad para elaborar encuestas. Crear su propia prueba puede ser una oportunidad para obtener una ventaja sobre la competencia. Pero es fundamental realizar pruebas de concepto correctamente para garantizar que los nuevos productos tengan las mejores posibilidades de éxito cuando lleguen al mercado.
MJV puede ayudarlo, y si desea que le echemos una mano, comuníquese con nosotros para agendar una consulta gratuita. Recuerde, no tiene que hacerlo solo.
Con las nuevas técnicas y estrategias disponibles, ¿Dónde encajan la experiencia del cliente (CX), el servicio al cliente y la gestión de la experiencia del cliente (CEM)?
Básicamente, ¿Cómo se aseguran las organizaciones de poner a sus consumidores en el centro de sus iniciativas y, lo que es más importante, por qué?
La premisa del Ebook – CX: Guía Completa. El Cliente en Primer Lugar es explicar todo lo anterior y mucho más, aportando de paso algunos ejemplos relevantes líderes en el mercado.
Haga clic en la imagen y descargue su Ebook gratuito.
Back